Según experto municipal Restricción de carrys puede solucionar congestionamiento vehicular en La Paz

El crecimiento acelerado del parque automotor en la ciudad de La Paz genera persistentes congestionamientos vehiculares, en distintas zonas, un problema serio en el cual las autoridades deben trabajar para resolver esta crítica situación diaria.

Según el experto en temas municipales Raúl Ríos una opción sería dejar de lado el servicio de los carrys. Es decir suspender sus operaciones.

Afirmó que después de la relocalización impuesta por el expresidente Víctor Paz Estenssoro, el parque automotor fue creciendo aceleradamente y de manera descontrolada.

Aquello fue acrecentándose con la llegada de los minibuses y carrys, actualmente estos son los más usados por la gente que quiere trasladarse de forma rápida de un sitio a otro.

Sin embargo, el número de estos vehículos hace intransitables las rutas por El Prado, la avenida Camacho, la avenida 6 de Agosto y otras centrales de la urbe, pues las vías se encuentran totalmente congestionadas, principalmente en horarios denominadas “pico”, es decir en la mañana, al mediodía y en la noche.

Según las previsiones de Ríos, en los años venideros se proyecta mayores congestionamientos vehiculares del que existe en la actualidad.

Para encarar el problema, recomienda a las autoridades municipales tomar previsión y trabajar para evitar que ello siga causando dificultades en el tránsito de la población en automotores.. En su criterio, un plan vial maestro sería una alternativa.

Si bien no se tiene una cifra exacta de cuántos carrys circulan en la urbe paceña, el Instituto Nacional de Estadística (INE) hasta 2010 registró 15.207 minibuses, cifra que va en ascenso a medida que pasan los años.

En una oportunidad, el alcalde Luis Revilla afirmó que tratarán con los choferes el uso exclusivo de los carrys, para que más adelante sean reemplazados por los minibuses.

ATRASO DE PASAJEROS

Según un estudio de Cepal, la congestión vehicular obliga a los pasajeros de los buses a demorarse más al efectuar sus desplazamientos. El mayor tiempo de viaje es un perjuicio real, que posiblemente no llame demasiado la atención, porque los ingresos relativamente bajos de estos pasajeros hacen que se asigne un bajo valor monetario a su tiempo personal.

En América Latina, especialmente, los usuarios de los autobuses urbanos tienen ingresos muy inferiores a los de los automovilistas urbanos, señala el documento.

“El transporte individual tiene su lugar, pero no hay que exagerar. Una característica que dificulta el combate contra la congestión en América Latina es la marcada preferencia de su población urbana por usar el automóvil.

“En estas circunstancias, aunque las autoridades responsables el transporte urbano latinoamericano tuviesen ideas claras acerca de cómo controlar el tránsito en la ciudad (lamentablemente, a veces no las tienen), difícilmente podrían llevarlas a la práctica, porque los diputados o concejales, están más preocupados de perder votos entre los cada vez más numerosos propietarios de automóviles particulares”, señala.

APROXIMACIÓN GLOBAL

Para Cepal, el tema de la congestión es un problema serio y contundente como para suponer que puede ser mitigado con medidas unilaterales, erráticas o voluntaristas.

Los investigadores de Cepal afirman que urge un esfuerzo multidisciplinario que incluya el mejoramiento de los hábitos de conducción, la provisión de mejor infraestructura (manejo de la oferta) y medidas de gestión de tránsito (manejo de la demanda).

“Las vías urbanas latinoamericanas no tienen la capacidad suficiente para soportar el uso indiscriminado del automóvil particular, y no la van a tener nunca, aunque se tomen todas las medidas financieras, ambientales y políticamente factibles para ampliarla”, afirma.