Friday, May 13, 2016

Transporte pesado y Gobierno discuten un nuevo “gasolinazo”



Organizaciones agrarias y vecinales se pusieron en alerta luego de conocer las declaraciones del representante del transporte pesado de Chuquisaca, Oscar Reynolds, quien dijo este jueves que su sector acepta la propuesta presentada por el ministro de Economía, Luis Arce Catacora, de eliminar la subvención a la gasolina y al diesel.

“Las bases han indicado que sí, estamos de acuerdo, apoyamos esa propuesta del señor ministro Arce Catacora, él nos dijo ‘levantaremos la subvención’ y lo aplaudimos ayer, y hoy lo han ratificado las bases, dicen que la medida que ha tomado el ministro Arce Catacora lo acepta el transporte pesado chuquisaqueño”, informó el dirigente, según el reporte del periodista Iván Ramos difundido por la Agencia de Noticias Fides (ANF)
El representante de la Federación del Autotransporte 15 de Abril, Damián Castillo, señaló que la propuesta todavía no ha sido socializada, pero si indicó conocer que “quienes están negociando el tema de las facturas son los de la Cámara del Transporte”.
Y es que la “patronal” del Transporte exigen al gobierno la revisión y modificación del Código Tributario para que todas las facturas les sirvan como crédito fiscal y que sus deudas se calculen en bolivianos y no en UFV, entre otras demandas.
Con la actual subvención de los carburantes, el Servicio de Impuestos Nacionales (SIN) solo reconoce el 70 por ciento del valor de las facturas por compra de carburantes a la hora de calcular el impuesto y las utilidades. Reynolds indicó que el retiro de la subvención los beneficia porque ya podrán beneficiarse del 100 por ciento del valor de compra.

¿Adiós a la subvención?
“El señor ministro nos ha propuesto levantar la subvención a los hidrocarburos y que todo el crédito fiscal del diesel y la gasolina nos devuelven al 100%”, apuntó.
El dirigente no especificó si la propuesta de retirar la subvención se realizará a todo el parque automotor o solo al sector del trasporte pesado que por lo general utiliza diesel.
El 26 de diciembre de 2010, el Gobierno del presidente Evo Morales determinó incrementar el precio de la gasolina en 73% y del diesel en 83%, para reducir de manera significativa la subvención a los carburantes que se acercaba a los $us 1.000 millones.
Cinco días después, el 31 de diciembre, el Presidente derogó el Decreto 748 del gasolinazo, ante el fuerte rechazo popular.
Actualmente el precio subvencionado del litro de gasolina especial es de Bs 3,74. De retirarse la subvención subiría a Bs 8,68 el litro, de acuerdo al precio internacional.
En el caso del diesel, el precio del litro subvencionado es de Bs 3,72. Sin la subvención subiría a Bs 8,88 el litro, según información de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH).



¿Es buen momento para levantar la subvención?

En pasada entrevista realizada por El País eN al ministro de Hidrocarburos Luis Alberto Sánchez, este rechazó la posibilidad y argumentó, entre otras cosas, el mecanismo de precios fijados para las petroleras que operan en el país, etc.
El precio del barril de petróleo a nivel internacional se ha estancado en los 45 dólares luego de caer en dos años desde los 130 dólares a los 30. Los analistas señalan que el precio difícilmente vuelva a subir a las tres cifras fundamentalmente por la inundación de crudo en el mercado que han provocado las técnicas no convencionales (fracking) sobre todo implementadas en EEUU.
Varios analistas cuestionan las cuentas de la ANH y consideran que el precio libre actual se acercaría bastante al ratio actual, por lo que permitiría la eliminación ya que la confrontación social sería menor.
El descongelamiento progresivo del precio de la gasolina, protegiendo a sectores estratégicos como el transporte de mercancías, de pasajeros y el sector agrario en similares condiciones que lo hacen países del entorno cargaría sobre el sector netamente privado la medida e incluso activistas ambientales consideran necesaria la medida para desincentivar el uso indiscriminado del auto privado, sobre todo en ciudades y donde Tarija es un ejemplo del problema.
Por otro lado, economistas también advierten que con la economía atravesando tiempos de “austeridad” y “moderación”, con recortes y pérdidas de puestos de trabajo en el sector público y privado, la medida desincentivaría aún más la inversión perjudicando por lo tanto al crecimiento.
En cualquier caso, el precio internacional de los hidrocarburos sigue siendo sujeto de análisis permanente.



EL APUNTE

El Gobierno todavía no desvela su intención

Pese a que en varias ocasiones el ministro de Economía Luis Arce Catacora y el de Hidrocarburos, Luis Sánchez, se han referido a la subvención de los carburantes como una de las lacras de la economía boliviana, desde el intento fallido de 2010 el asunto no se ha vuelto a poner sobre la mesa de forma abierta hasta la fecha, si bien nunca ha pasado a estar totalmente archivada. El termómetro social es clave en la decisión.

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