Durante la construcción de la Terminal Interprovincial del norte de El Alto, los obreros hallaron cientos de esqueletos que habrían sido parte del primer cementerio alteño.
Se aseguró que los restos serán enterrados en una fosa común luego de terminar las excavaciones y la recolección de restos, sin embargo, muchos otros quedarán bajo los cimientos de este sitial que hace algunos años era una plaza.
Desde hace un mes atrás, cientos de esqueletos y restos óseos están siendo recolectados por los obreros de la construcción de la nueva Terminal Interprovincial de El Alto, quienes al realizar las excavaciones, encontraron varias tumbas, de lo que fue el primer cementerio de esta urbe.
“Hace más de 25 años, esto era un cementerio, aquí se enterraban todos los muertos, los traían a pie desde lugares alejados, pero con el tiempo y la falta de orden, los nichos se han ido confundiendo y los familiares ya no reclamaron sus derechos”, señaló uno de los constructores de la obra que no quiso ser identificado.
Asimismo, los pobladores del lugar señalan que incluso en el lugar habrían existido dos fosas comunes en las que se enterraron a los mineros que fallecieron en las dictaduras, pero por los asentamientos y el crecimiento de la zona, hace algunos años ya se construyó una plaza sobre el cementerio.
En el lugar, se puede observar, en medio de la tierra removida, ropas, aguayos, pedazos de ataúdes, cráneos y varios huesos que están siendo recogidos para luego llevarlos a una fosa común en otro camposanto.
“El sábado pasado, les hemos hecho dar una misa y se ha echado agua bendita en el lugar, para que las almas descansen en paz y después podamos llevarlos a otro lado”, manifestó el trabajador.
En uno de los sectores, se pueden ver cráneos pequeños que pertenecerían a niños y bebes, que están acompañados de mamaderas y juguetes con los que seguramente fueron enterrados.
De la misma forma, indican que el terreno tiene una extensión de al menos una hectárea, en la que existen subsuelos de nichos que no podrán ser sacados, por lo que se quedaran enterrados bajo la nueva edificación.
Ante esta situación, el dirigente de la zona de Villa Esperanza, Hugo Alabe, indicó que ellos están a la espera de la disposición de las autoridades de la gobernación, quienes dijeron que hasta la próxima semana les darán el lugar donde se trasladara los restos.
Al respecto, el jefe de la División de Homicidios, de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen, capitán Juan Carlos Aparicio, aclaró, que este procedimiento debe llevarse a cabo con orden de fiscalía y la presencia de un forense, que debe dar la data del cementerio, para dar una licencia de entierro en una nueva fosa común en algún cementerio.
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