Alrededor de 12 taxistas del sindicato Virgen de Candelaria que acompañaron el ataúd de uno de sus compañeros fallecidos aseguran que existe un notable incremento en la inseguridad ciudadana que pone en peligro sus propias vidas, expresó Gregorio Mamani, uno de los participantes de la manifestación.
Asimismo, informó que esto trae mayores conflictos para su sector debido a que ellos trabajan también en horario nocturno, incluso, los fines de semana.
“Estamos gritando con bronca, porque nosotros como taxistas, día a día, tenemos que salir a trabajar con el Jesús en la boca. Nosotros hemos dado con el cadáver del compañero en el plan 3.000, hemos solicitado la detención de las tres personas involucradas y que han hecho los funcionarios policiales, el fiscal Santos Valencia, simplemente los han puesto en libertad”, expresó Mamani.
Asimismo, el entrevistado recuerda que el fin de semana, cuando encontraron el cuerpo de Hulyuco, más de 80 funcionarios policiales se presentaron en el sector con equipo antimotines, con la finalidad de ofrecer protección a los detenidos y prestos para reprimir a las víctimas, taxistas y vecinos del desaparecido.
El servicio de ‘Taxi Sur’, que realiza el recorrido de Senkata a las diferentes urbanizaciones del D-8, no tiene ningún sistema de seguridad ni de comunicación, por lo que los teléfonos celulares de los taxistas son los únicos instrumentos con los cuales buscan comunicarse para mantenerse ‘seguros’.
Los conductores se ven frustrados cuando políticos, ministros y autoridades municipales constantemente suelen ofrecer vehículos de seguridad ciudadana, equipamiento policial y planes policiales, pero, para Mamani, todos esos ofrecimientos que suelen incrementarse en temporada electoral poco o nada son destinados a los distritos municipales más alejados donde la seguridad ciudadana sólo depende de uno o del grupo con el que debe trabajar.
“La inseguridad llega al extremo porque el pasado martes, en el mismo sector del plan 3.000 los funcionarios de la Unidad de Homicidios de la Felcc han efectuado el levantamiento legal de tres cadáveres más y nadie dice nada, los funcionarios policiales se callan de esos cuerpos, nunca informan hasta que la familia los reconoce en la morgue y vemos con preocupación que ese sector de asentamientos ilegales se prestan para hechos ilícitos porque no existe presencia policial”, aseguró Mamani.
Los taxistas ven que sólo en la zona 27 de Septiembre existe un módulo policial con dos funcionarios, quienes son los únicos uniformados destinados al Distrito 8 aspecto que es calificado de burlesco, porque en los más de tres kilómetros entre este punto y otras zonas no existe alumbrado público, servicios básicos y menos patrullaje policial.
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