El bloqueo del centro de la ciudad por parte de 800 afiliados del Sindicato de Micros y Colectivos para exigir que el municipio recupere la capacidad vial de las calles y ordene el comercio sacó a relucir la crisis del sector por la existencia de 120 líneas que han agudizado la situación del transporte masivo, debido a que el municipio ha privilegiado el microtransporte (taxitrufis).
Al crecimiento del transporte público se suma la aparición de nuevos operadores que brindan servicio sin estar autorizados por ninguna ordenanza como consecuencia de los denominados desdobles de las líneas habilitadas para prestar servicio. Los micreros, único sector que aplica el pasaje diferenciado, también protestó por la falta de policías de tránsito, la inseguridad y la invasión de las vías por parte de los comerciantes.
El dirigente del Sindicato de Micros y Colectivos, José Luis Cardozo, informó que 97 líneas federadas y libres están reconocidas por la Ordenanza 3302. Entretanto, 23 pertenecen al sector libre y fueron creadas al amparo de la Ordenanza 4195.
La dirigencia de los micros observó, además, que hay líneas que cuentan con 500 motorizados para realizar “varios desdobles”, lo cual incrementa el caos vehicular. Entre las líneas cuestionadas por el sindicato están los taxitrufis 130, 101 y 110.
Los choferes denunciaron que la Alcaldía trabaja desde hace diez años en el Comité de Transporte la Ordenanza Municipal 3302 que debe establecer las rutas para cada línea. “Hay una mano negra que retrasa su tratativa”, expresó un chofer.
Conflicto
Ayer cerca de 800 afiliados del Sindicato de Micros y Buses realizaron un paro con bloqueo de calles desde las 6:00 hasta las 17:30. La medida concluyó con dos actas de entendimiento.
En la primera Tránsito y el Comando Departamental de la Policía se comprometieron a reponer el personal para el control en la ciudad y desplegar 100 policías durante las ferias de los miércoles y sábados. En la segunda, la Alcaldía acordó instar al Comité de Transporte a tratar por tiempo y materia la conclusión de la norma 3302. Además, la Intendencia intensificará los controles para el despeje de comerciantes y la guardia municipal de Movilidad Urbana se enfocará en su trabajo y no en actividades al margen de su competencia.
Cochabamba fue “al revés”
“El manejo que ha hecho la Alcaldía del transporte no ha sido el más adecuado”, afirmó el ingeniero vial que forma parte de la campaña vial PARE, Carlos Ballón. Explicó que se ha permitido la proliferación de líneas que pasan por el centro urbano y existe una falta de visión del empleo de las rutas.
Todo esto ha ahondado la crisis del transporte en la ciudad y ha provocado que cada vez sea más difícil contar con un sistema eficiente. La mayoría de la gente tarda casi una hora en llegar a centros estratégicos como mercados, universidades y trabajos.
Ballón calificó de erróneo que el municipio haya priorizado, en ésta y anteriores gestiones, el microtransporte (trufis y taxitrufis) en lugar del transporte masivo de micros. Aseveró que en Cochabamba se trabajó al revés de otras ciudades como La Paz.
Pero, además, señaló que no se cuenta con terminales intermedias para el transporte intermunicipal y se permite que líneas que vienen de Sacaba y Quillacollo ingresen hasta el centro de la ciudad.
Parte de la solución consiste en contar con un plan de movilidad urbana para realizar la transición de las unidades antiguas a nuevas y de mayor capacidad de pasajeros. “Hemos ido al revés hacia unidades con menor capacidad”, concluyó.
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