Los choferes de La Paz anunciaron el viernes el inicio de un paro indefinido a partir del lunes 26 de octubre

Los choferes de La Paz anunciaron el viernes el inicio de un paro indefinido a partir del lunes 26 de octubre, en demanda de un incremento de las tarifas del transporte público, mientras que el alcalde Luis Revilla exigió levantar esa medida si es que quieren sentarse a la mesa del diálogo.
El secretario ejecutivo de la Federación Sindical de Choferes de La Paz, Roy Pati, anunció que en esta jornada se decidirán las estrategias que serán asumidas a partir del lunes.
"El paro indefinido es el lunes, será movilizado, así ya lo han determinado los secretarios generales y hoy nos estamos reuniéndonos en un ampliado para determinar cuáles serán las formas y las estrategias a seguir de aquí en adelante", dijo.
Aseguró que su sector está abierto al diálogo, pero con posiciones claras por parte del Alcalde, quien -dijo- no tiene la predisposición de convocar al diálogo.
A su juicio, Revilla lo único que busca es "provocar" al autotransporte con los controles que realiza la Guardia Municipal desde tempranas horas de la mañana.
"Nosotros decimos, discutamos en una mesa de diálogo, ya que estamos exigiendo una demanda justa, pero también a la par hablemos del tema de mejoramiento y del trameaje", agregó.
Por su parte, el burgomaestre paceño exigió a los choferes de La Paz suspender su anunciado paro programado para el próximo lunes, de lo contrario -advirtió- que no convocará al diálogo.
"Si es que ellos persisten en mantener sus movilizaciones será imposible llevar adelante una mesa de diálogo, si ellos suspenden sus movilizaciones que han anunciado para el día lunes pues inmediatamente los vamos a convocar a conversar", aseveró.
Recordó que el reclamo que tienen los vecinos es el incumplimiento de rutas y la eliminación del trameaje, para lo que debe aprobarse la Ley de Rutas y Recorridos y los mecanismos de mejora del transporte y contar con un transporte ordenado.
Ayer, los choferes de La Paz realizaron un paro de 24 horas y bloquearon los principales puntos de acceso al centro paceño, exigiendo un incremento en los pasajes de micros, truffis y minibuses