Efraín Enrique tiene más de 20 puntos en su frente que resultó cortada de ceja a ceja en el accidente de la flota Trans Capital que la madrugada del sábado se embarrancó en la localidad de Saipina.
Este paciente tiene el rostro hinchado y el brazo derecho fracturado y por ello necesita medicamentos y una cirugía para corregir los huesos lisiados. Sus familiares, al igual que de los demás, denuncian que hasta el final del domingo ningún representante de la empresa ha dado la cara.
Aguarda que la empresa se haga cargo de los gastos. Jorge Zambrana Salvatierra (29) comenta que en este viaje todo comenzó mal. Su viaje era programado para las 16:00 pero se retrasó dos horas. El encargado de vender pasaje en la terminal “nos dijo que el chofer estaba borracho y que estaba consiguiendo otro, luego que la flota no salía del taller, que estaban reparando los frenos, ya a eso de las 6 aparece un chofer con su hijita, fueron los dos que murieron”. Jorge agrega que a medio camino el conductor recogió a su esposa “el chofer estaba tomando y boleando y discutía con su mujer y venía corriendo fuerte, todos le decían que reduzca la velocidad”. Este herido relata que cuando la flota estaba cayendo “yo salí expulsado por la ventana”. Jorge tiene dos vértebras lesionadas y fisuras en su cadera, también necesita ser operado. Su esposa, Norma, agrega "yo pagué 500 bolivianos a un taxi para que traigan a mi marido porque dijeron que no había ambulancias, espero que me devuelvan porque necesita para remedios".
Ayer la empresa, propietaria de la flota, no abrió sus puertas y eso desconcertó a los heridos.
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