Hasta el momento sólo 10 buses Sariri de los 60 adquiridos por la gestión de Édgar Patana circulan en la urbe alteña, informó ayer el secretario municipal de transportes, Moisés Ávila. Aclaró que debido a la falta de presupuesto sólo funcionan dos rutas de las cuatro establecidas para ese fin.
El resto de los buses se encuentra en depósitos de la Fuerza Aérea, el Centro de Convenciones y en Hansa. En este último hay 11 vehículos que aún no fueron entregados a la Comuna.
"Actualmente se mantiene el funcionamiento del sistema con 10 unidades para todo El Alto. Estamos con la Ruta Norte que va hacia San Roque y Ventilla. El resto de las unidades está en paradas o en mantenimiento en Hansa”, sostuvo la autoridad municipal.
Para cada una de estas rutas en funcionamiento han sido asignados cinco buses para el servicio de transporte. La autoridad detalló que de los 50 restantes, 29 se encuentran en los parqueos de la Fuerza Aérea y del Centro de Convenciones y 21 en Hansa.
"De los 21 que están en Hansa, 10 están en mantenimiento y 11 aparentemente no fueron entregados al municipio. Ha habido bastante negligencia por parte de las autoridades salientes y debemos encontrar a los responsables de este daño”, señaló Ávila.
Asimismo, aclaró que los 29 buses que están parqueados no pueden entrar en circulación por falta de presupuesto para sus operaciones. Según Ávila, la gestión de Édgar Patana y de Zacarías Maquera dejaron un presupuesto para el funcionamiento del sistema de transporte municipal solo hasta el mes de mayo, lo que generó un déficit aún no contabilizado.
"Hay un déficit. Nos han dejado a toda la secretaría sin presupuesto para operar. Sólo han previsto para la gestión anterior. No hay recursos y esperamos el reajuste del POA número 3 para poder arrancar con todo el recurso que se requiere”, sostuvo.
"Una vez podamos ver la situación a cabalidad, en una primera fase vamos a reforzar estas dos rutas que son las más requeridas y, en una segunda, veremos la integración con las estaciones del teleférico, cosa de que podamos conectar los sistemas de transporte”, explicó.
Añadió que se ven varias irregularidades inclusive en "contrataciones improvisadas” de personal y de mantenimiento que deben ser revisadas.
Las recaudaciones y el servicio son otros puntos pendientes de evaluación para identificar las responsabilidades.
"Vamos a hacer el relanzamiento, pero ahora se debe hacer una auditoría a las contrataciones, al servicio, a la recaudaciones y revisar un plan de contingencia, porque el estado en el que recibimos los Sariri es catastrófico”, dijo la autoridad.
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