La gente ya está más acostumbrada a ellos, pero los primeros días en que comenzaron a circular, los peatones se detenían a sacarles fotos, los niños los saludaban, muchos vehículos se hacían a un lado y era el comentario del día el contar un viaje en uno de los buses PumaKatari, la moderna flota de transporte municipal, parte del Sistema Municipal de Transporte (Setram) en La Paz, que está cambiando la caótica vida de los ciudadanos paceños que deben usar vehículos públicos para transportarse.
Y es que después de ser una de las ciudades de América Latina con el transporte público en peor estado y con las peores condiciones, la llegada de la flota de buses amarillos con alegres dibujos, muy hermanados con el concepto de las cebras paceñas, le ha cambiado la cara a las calles en La Paz. Espaciosos, modernos, pero sobre todo con una cuidada atención a los pasajeros, los PumaKatari se han convertido en un patrimonio para los paceños quienes los ven cómo un símbolo de progreso pero también de liberación.
Poco a poco va quedando atrás la tiranía del transporte sindicalizado, famoso por su conflictividad, que somete a los usuarios a un trato denigrante, sin ninguna comodidad, y sin ninguna garantía para su seguridad, y cada vez son más los pasajeros que buscan viajar en un PumaKatari, con el que se está enseñando a exigir un mejor trato y a conocer viajar en un transportarse seguro y, aunque dada la demanda no necesariamente sentado, no hacinado como en los buses públicos, cada vez más antiguos y peligrosos. De acuerdo a la Cámara Automotora de Bolivia, el parque automotor boliviano tiene tan solo el 20% de vehículos nuevos, con antigüedad menor a 10 años y mantiene una constante de hasta el 50% con antigüedad entre 10 y 20 años.
UN PROYECTO MUY PENSADO
Conversamos con el alcalde Luis Revilla acerca del cambio que ha significado para la ciudad sede de gobierno la llegada de los buses, creados con las especificaciones para la ciudad de La Paz, con su caprichosa y difícil topografía. Los buses han sido ensamblados en China con partes alemanas, tienen capacidad para 61 pasajeros y circulan diariamente, los 365 días del año a horarios determinados durante las 24 horas.
Transportan el equivalente a cuatro minibuses y ocho trufis y funcionan en las rutas Inca Llojeta-Parque Urbano Central (PUC) y Villa Salomé-PUC, de forma semiexpresa, ya que usan rutas alternas y tiene paradas definidas: 34 en la primera y 37 en la segunda. La ruta 3 (Chasquipampa-PUC) tiene 38.
En horas pico, la frecuencia de llegada de buses a las paradas será de 7 a 8 minutos (min), de 09.30 a 12.00 (de 12 a 15 min); de 20.30 a 23.00 (30 min) y entre las 23.00 y 05.00, de una hora. Los cálculos han estimado que el Setram traslade alrededor de 2.000 personas diariamente, pero este es sólo el comienzo. La Alcaldía ya ha lanzado la licitación para buses que cubran la ruta de La Paz y El Alto, la más transitada.
Ha sido un proceso largo, de diez años, para implementar un servicio de transporte masivo con distintos estudios, entre ellos el de los buses y se escogió este último, según explica Revilla, porque tiene una alta capacidad de transporte de pasajeros, y por el costo. Existen antecedentes de haber querido construir un tren elevado, pero es demasiado caro, por lo que se implementaron los PumaKatari.
“El proyecto consiste en dos fases, la implementación del sistema para su funcionamiento en ejes troncales de la ciudad, buses de alta capacidad que crucen de norte a sur, y de este a oeste, y al mismo tiempo tienen que haber buses alimentadores que estos que cruzarán por el centro y que son más pequeños que aquellos que funcionan en el eje troncal. Hemos decidido empezar por esta fase, el PumaKatari es un servicio alimentador que permite transportar pasajeros desde lugares lejanos hacia el centro, pero no ingresa al centro de la ciudad, además es la característica del proyecto. Esta otra fase está todavía en diseño, estamos haciendo los estudios con el BID y son estudios compartidos con El Alto, porque este sistema troncal tiene que interconectarse necesariamente con El Alto, serán buses grandes que vendrán desde El Alto, bajarán la autopista y llegarán hasta la zona sur, buses con capacidad de 120 pasajeros.”
El día antes a esta entrevista, el Gobierno Municipal había lanzado la licitación para la compra de un prototipo, un vehículo de dos pisos ya que los articulados tienen más dificultad de circular por las calles de La Paz, “los estudios técnicos que se han hecho dan cuenta de que un bus de doble piso es más funcional, si da resultado vamos a comprar más a tiempo de terminar los estudios con El Alto para la implementación de la ruta troncal pero eso está en espera”.
A fin de año se espera abrir cuatro rutas más y finalmente llegar a 20, que son las que se necesitan en la ciudad para cubrir la demanda necesaria. “Hubo estudios pero está claro que en nuestras ciudades existe una demanda clara de contar con un transporte moderno, seguro y eficiente y con calidad. El gran crimen que se ha producido en el país es haber liberalizado el servicio de transporte, lo que no ha ocurrido en otros países incluso en momentos de gobiernos ultraliberales, no ha ocurrido, siempre ha habido un control del Estado sobre el sistema de transporte pero acá se ha liberalizado lo que ha significado un descontrol absoluto que ahora estamos comenzado a revertir de a poco.”
La Paz es la primera ciudad que ha aprobado su Ley Municipal de Transporte, lo que le ha permitido a la Alcaldía implementar el Setram pero al mismo tiempo tomar varias medidas sobre el sistema de transporte tradicional para ordenarlo y volver a tomar el control sobre la regulación, tarea que el alcalde Revilla reconoce como difícil y compleja, “hemos logrado que todos los vehículos de transporte público tengan un tarifario, lo que era impensable pero ahora lo tenemos pero todavía hay muchas cosas por hacer como ordenar las rutas, garantizar el cumplimiento de esas rutas, racionalizar el sistema automotor del parque tradicional, necesitamos que se modernice, en el entendido de que nuestra obligación como autoridades no es convertirnos en un operador del sistema de transporte, nuestra finalidad es que la gente tenga un buen transporte, no importa quién lo preste, y esa es la otra razón de la implementación del sistema bus La Paz, que genere un efecto demostrativo de lo que significa tener un sistema de transporte público decente y que eso nos ayude a transformar el sistema tradicional.”
PARÁMETROS DE CALIDAD
Siendo que la ciudad de La Paz ha vivido, y vive todavía un sistema de servicio de transporte público deficiente, y que cuando los PumaKatari tomaron las calles, los choferes sindicalizados protestaron, trataron de boicotearlos, e incluso se enfrentaron a la ciudadanía que defendía el paso de los buses, se habló de que la Alcaldía podría haber llegado a un acuerdo con los choferes para que en cierto momento los PumaKatari pasen a control del transporte sindicalizado, pero Revilla niega esto rotundamente, “no existe ningún acuerdo en ese sentido, aunque a futuro tendría que ocurrir, ahora los sindicatos, aunque tienen esa nominación son empresas unipersonales o quizá en sociedad camuflada que no tienen ninguna posibilidad de prestar un servicio como el bus, pero ciertamente se debería llegar a que los operadores privados tengan la capacidad de prestar un servicio de calidad, regulado por el Estado, en beneficio de la ciudadanía. Otro dato muy importante es que el sistema de bus La Paz, no puede ni va a sustituir al conjunto del transporte público; hay lugares donde el bus no puede llegar, hay características de la ciudad que requieren de un transporte privado, que sea prestado bajo ciertos parámetros de calidad establecidos por el Estado, las municipalidades, así funciona en otros países y así debe funcionar en La Paz.” El sistema no ha funcionado porque los choferes sindicalizados hayan negociado con nosotros, sino porque durante tres años antes de la implementación del sistema le hemos mostrado a la gente lo que significaba tener un transporte tan desastroso como el que existe en la ciudad, y lo que significaba tener un sistema decente, hemos preparado el terreno durante tres años y eso ha ayudado mucho porque se ha comenzado a generar un estado de ánimo colectivo de una fuerte demanda por la mejora del transporte, esa es una de las razones, el que si bloqueaban los transportistas, iban a tener una reacción dura de la gente; la segunda razón de por qué ha funcionado es porque ha sido pensado de tal manera que cubra la demanda de la gente pero no signifique un conflicto con el transporte actual.”
Dentro de los ejemplos que Revilla destaca como transporte público está el bogotano Transmilenio, operado por tres entidades, uno de los cuales es el municipio, el otro operador es de los transportistas y el tercero es de los transportistas, de forma que las tres compiten bajo rigurosos parámetros de calidad, mejorando sus ofertas de nuevas líneas, etc., y ha sido tal el éxito que ha tenido el operador conformado por los ex choferes de transporte público, que acaban de ganar la licitación de una línea de transporte en Lima. “A eso debemos llegar, a que preste quien preste el servicio, lo haga con calidad y no estamos en ese momento”, dice Revilla.
El municipio dentro de sus obligaciones y atribuciones tiene la de sancionar el mal servicio de transporte público mediante multas económicas, la guardia municipal creada para ese rol identifica denuncias de pasajeros, cobros indebidos, y entrega una boleta al conductor, que va aumentando su costo si es que no es pagada a tiempo, llega un momento en el que la guardia municipal hace operativos, identifica a los vehículos que no han pagados sus multas y les retira sus placas, y los vehículos no pueden circular. Este dinero va al Tesoro Municipal.
Otro problema es el trameaje, o el no cumplimiento de las rutas, que se quiere arreglar con la nueva Norma de Rutas, que se está discutiendo con los transportistas y que debe aprobar el Consejo, con lo que quiere poner un candado al tema.
Revilla dice que con los análisis que se tienen después de estos días de servicio, se ha llegado a la conclusión de que los paceños lo que necesitan es un servicio de transporte seguro, en todo sentido, “seguro en que se sepa que el bus va a llegar, lo que es esencial para movilizarse, lo que no se tiene con el transporte tradicional, y por supuesto un transporte en buenas condiciones de funcionamiento, lejos de la delincuencia, etc.
Los PumaKatari no circulan por las mismas vías del transporte tradicional porque si lo hicieran perderían velocidad, y además porque al tener paradas fijas no necesitan ir buscando pasajeros en cada esquina.
TARJETAS
A partir de la próxima semana saldrán a la venta 2.000 tarjetas Mifare Plus de última generación para los usuarios del LaPaz Bus, acá se tendrá también el sistema de pagos diferenciados a personas mayores, y escolares. En un principio se venderán en las paradas y luego se quiere implementarlas en farmacias, supermercados, etc.
Las tarjetas tienen tecnología de última generación y obtuvieron el nivel tres de seguridad. En el mundo, Francia, China, Canadá, Kuala Lumpur y Londres manejan esta tecnología y convierte a La Paz en la pionera de Sudamérica, según un boletín edil. Desde que entró en operaciones, en febrero de este año, los PumaKatari transportaron a 4,1 millones de pasajeros, con un costo del pasaje de Bs. 2.- El sistema opera actualmente con una flota de 61 buses. Además, se licitó la compra de otros 73 buses y de 14 unidades de mediana capacidad para que el servicio siga creciendo al ritmo de la ciudad más cosmopolita de Bolivia.
“De lujo...”
No sólo los buses han sido pensados para beneficiar a toda la ciudadanía, las paradas también han sido adaptadas con puntos especiales de abordaje y descenso de personas en sillas de ruedas: cinco en la primera, 11 en la segunda y 14 en la tercera. Otros implementos importantes de bus es el monitoreo de cada unidad con dispositivos GPS (geolocalización) para garantizar que no sobrepasen los 60 kilómetros por hora, ascensor para sillas de ruedas, asientos preferenciales para grupos vulnerables, menores, ancianos y embarazadas. Los pasajeros podrán conectarse gratis al Wi-Fi (internet inalámbrico) y el sistema de pago, aunque ahora es en efectivo a una persona indicada para ello, será validado a través de sensores manejados por una notebook que permitirá el giro del torniquete, que garantiza que no se evada el pago del pasaje. (Con datos de La Razón).
UN NÚMERO IMPORTANTE
Entre 2012 y 2013, las mayores tasas de crecimiento del número de vehículos se registraron en:
Beni (21,18%)
Santa Cruz (11,72%)
Chuquisaca (11,57%)
Tarija (9,62%)
La Paz (9,36%)
Potosí (8,09%)
Cochabamba (7,93%)
Oruro (7,36%) y
Pando (51,37%)
Santa Cruz cuenta con la mayor cantidad de vehículos 419.470, que equivalen a 31,61% del total; le siguen La Paz con 331.089 vehículos ( 24,95%) y Cochabamba con 296.538 vehículos (22,35%), de acuerdo con el reporte del INE.
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