En los casi 15 días de operación del LaPazBus —transporte edil que rige los buses PumaKatari— al menos 200 personas que utilizan sillas de ruedas usaron el servicio, dijo el oficial asesor, Gustavo Bejarano. Los datos son al 7 de marzo.
Los motorizados disponen de un ascensor hidráulico para facilitar el ascenso y descenso de las personas que utilizan sillas de ruedas, el cual se activa al presionar un botón.
“Es relativamente representativo mover a esa cantidad de personas sabiendo que no son todos, porque a algunos el servicio todavía no les va a llegar. Hay gente que vive en sitios alejados de las paradas de los buses, salvo que hagan un viaje extraordinario”, explicó el funcionario.
El LaPazBus inició operaciones el 17 de febrero en las rutas Inca Llojeta (Cotahuma)-Parque Urbano Central (PUC) y Villa Salomé (San Antonio)-PUC, mientras que el 7 de marzo se inauguró la ruta Chasquipampa (Sur)-PUC. En los dos primeros recorridos el pasaje es de Bs 1,80 y en el tercero, Bs 2,00. A partir de las 23.00 y hasta las 05.00 se paga una tarifa única de Bs 3,00.
Sin embargo, los individuos con discapacidad pagan un pasaje preferencial en el horario normal de Bs 1,00.
Según Bejarano, con la inauguración de la ruta al sur se abrirá la posibilidad de que el servicio sea usado por personas que tienen discapacidad, ya que una de las paradas está ubicada en cercanías del Instituto Boliviano de Rehabilitación de la Caja Nacional de Salud, situado en la calle 15 de Calacoto.
Una de las dificultades con las que se tropezó con estos usuarios, es que quisieron bajar en sitios no autorizados. El funcionario espera que las personas con discapacidad se vayan acostumbrando a usar las paradas.
Ascensor, para 56 paradas
De las 98 paradas que tiene el LaPazBus, 56 están habilitadas para el uso el ascensor hidráulico con el que cuenta cada bus, para facilitar el ingreso y salida de los usuarios en silla de ruedas.
El oficial asesor, Gustavo Bejarano, explicó que no en todos los apeaderos se puede utilizar este implemento debido a la alta pendiente en la que se halla la parada o la falta de espacio en las aceras para que una silla se acomode.
“Se han seleccionado paradas específicas y vamos a poner el logo de las sillas de ruedas para guiar a los usuarios”, apuntó el edil.
La ruta Chasquipampa-Parque Urbano Central (PUC) tiene 34 paradas, de las cuales 26 están habilitadas para el uso de sillas de ruedas. En la ruta Villa Salomé-PUC hay 30 y 20 puntos habilitados para los discapacitados.
En la ruta Inca Llojeta-PUC hay 30 apeaderos, de los cuales solo 10 están habilitados debido a las altas pendientes.
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